martes, 15 de marzo de 2005

El preservativo falla: lo dicen los centros de reparto de píldoras del día después

El Hospital de Badalona, pionero en España en repartir píldoras, confirma los datos del Hospital del Mar de Barcelona: el 80% de sus usuarias sufren fallos del preservativo.

"Siempre que se utiliza el preservativo hay un riesgo", dice Mari Àngels Avecilla, entrevistada en 20 MINUTOS (18-2-2005), edición de Barcelona. Ella lo sabe bien porque cada mes recibe en el Hospital de Badalona entre 110 y 140 jóvenes pidiendo píldoras del día después. Y de ellas, unas 100 jóvenes al mes explican que les falló el preservativo.

"En el 79% de los casos falla el preservativo, y en el 2% reconocen haberse olvidado de tomar la pastilla anticonceptiva", dice Avecilla, que es la directora del Programa de Atención a la Anticoncepción de Emergencia en Badalona. Se trata de un programa pionero en España, que funciona desde marzo de 2004 y tiene por eso ya el informe de casi un año: 1.221 peticiones de píldoras entre marzo y diciembre, es decir, casi mil fallos de preservativos.

Avecilla, especialista en Ginecología y Obstetricia, no se asombra de que haya tantos fallos de preservativos, y piensa que la juventud es especialmente inepta usando con los anticonceptivos en la mano: "es lógico [que haya tantos fallos] teniendo en cuenta que acostumbran a ser chicas menores de 24 años que pueden tener dificultades en la manipulación de métodos anticonceptivos". Tampoco piensa que se vaya a mejorar mucho con más formación: "no creo que sea una cuestión de educación ni de asesoramiento. Siempre que se usa un preservativo hay un riesgo", dice la principal responsable de repartir píldoras del día después en Badalona, un municipio de 200.000 habitantes.

Al principio, en marzo, Badalona era un foco de atracción para "chicas en apuros" que querían la píldora. Desde el 1 de octubre la píldora empezó a repartirse por toda Cataluña. Lo lógico habría sido que bajase mucho la demanda en Badalona, ya que ahora podía pedirse en Barcelona, Santa Coloma, Sabadell... En realidad sólo ha bajado un 9,7%, lo que sugiere que desde octubre, simplemente, se consumen más píldoras.

Ocho de cada diez solicitantes son solteras sin hijos. La media de edad es de 22 años. Sólo un 25% tienen entre 16 y 18 años y sólo un 6% son menores de 16 años. No se trata de chicas descolocadas por ligues de una noche: el 80% declara tener pareja estable... una pareja a la que se le ha roto el preservativo. "Nos puede pasar a cualquiera", dice Maria Àngels Avecilla. Cabría quizá comentarle que la gente que ha decidido no depender del condón no sufre estos percances.

Que el preservativo falla se veía también en el Hospital del Mar de Barcelona

"Se me ha roto el preservativo", dijeron 7 de cada 10 chicas que pidieron la píldora postcoital en el Hospital del Mar de Barcelona entre 1994 y 2002. Otro 10% pide la píldora "por retención del condón". Es decir, de nuevo un 80%, según el estudio de Miquel Àngel Checa, del Servicio de Ginecología y Obstetricia de este hospital, que publicó su estudio en agosto en la revista CONTRACEPTION con los datos de las 5.656 píldoras requeridas en ese período, cuando era aún más difícil de pedir. Son 4.524 historias concretas y declaradas ante el hospital de condones que fallaron.

También la abortista clínica Dator señala los fallos de la anticoncepción

Un estudio publicado en 2003 por la clínica Dator de Madrid declaró que usaban preservativo el 49% de las mujeres que abortan en dicha Clínica de Madrid. Además, otro 10% de mujeres que abortaron usaban la píldora. Seis de cada diez mujeres que abortaron allí son víctimas de fallos de la anticoncepción. Según el informe de la clínica "la extrapolación de estos datos ha coincidido plenamente con el perfil definido en la totalidad de las usuarias de la clínica atendidas a lo largo de un año completo".

En Cataluña, gratuita y sin receta: lo paga la Generalitat

La Generalitat de Cataluña estableció que desde el pasado 1 de octubre la píldora sea gratuita y sin receta en todos los centros de asistencia primaria (CAP) y que llegue a serlo también en las farmacias. Según la consellera de Sanidad, Marina Geli, se trata de un “plan para reducir los embarazos en adolescentes”, que cuesta a los contribuyentes unos 500.000 euros anuales con lotes que incluyen: dos comprimidos de la píldora del día después, un preservativo, un díptico informativo y una etiqueta adhesiva para evaluar el programa. La idea es que cualquiera pueda pasar a recogerlos, gratis, por la farmacia del barrio.

Los padres que no se enteren

El director de Recursos Sanitarios de la Generalitat, Rafael Manzanera, explicó al presentar los planes de gratuidad de la administración catalana que "la confidencialidad está garantizada, puesto que prevalece la acción sanitaria por encima de la información a los padres". Es decir, cualquier menor de edad puede tomar esta pastilla en un CAP o pedirla gratis en la farmacia sin que sus padres sepan nada. A los padres se les piden autorizaciones firmadas para operar a sus hijos, para que vayan de excursión; en Cataluña la policía les avisa cuando sus hijos menores de edad son encontrados con demasiado alcohol... pero cualquier chica de 14 años puede tomar un potente fármaco abortivo cargado de hormonas cada pocas semanas sin que nadie avise a sus padres.
La píldora del día después es abortiva

La píldora postcoital, aprobada en 2001 durante el gobierno del PP con Celia Villalobos como Ministra de Sanidad, se presenta como un anticonceptivo de urgencia cuando en realidad tiene un efecto abortivo. En muchos casos, lo que hace el fármaco es impedir la implantación de un óvulo fecundado, lo que provoca un aborto. El aborto es un delito contemplado en el Código Penal español, pero las administraciones juegan a ignorar los hechos y tratan este compuesto químico como si fuese un anticonceptivo. Por ejemplo, la consellera de Sanidad catalana, Marina Geli ha insistido una y otra vez en que "la píldora del día después es anticonceptiva, y no es abortiva", lo cual es rigurosamente falso. El mecanismo abortivo está bien descrito en este gráfico animado de la agencia ACIPRENSA: http://www.aciprensa.com/vida/pildorads.swf .

Este fármaco tiene efectos secundarios como náuseas, fatiga, vómitos, vértigo y dolor de cabeza y abdomen. Sólo tiene eficacia si se toma la píldora en las 72 horas posteriores a la relación sexual (con una efectividad del 95 por ciento en las primeras 24 y del 58 por ciento en el tercer día).



Enfermedades oportunistas

Las enfermedades oportunistas engloban un conjunto de patologías que, como su nombre indica, aprovechan "oportunamente" la situación de bajas defensas de los pacientes VIH positivos para introducirse en el organismo.

En muchos casos, se trata de enfermedades que no aparecerían si el sistema inmunológico fuera normal. Esto no significa que sean enfermedades únicamente propias de las personas con VIH, hay muchas otras patologías además del sida, que pueden dañar al sistema inmune. Como siempre, sólo es el médico quien determinar el diagnóstico.

Estas son algunas de las enfermedades oportunistas más frecuentes:


· Neumonía por Pneumocystis carinii: neumonía fatal causada por un microorganismo, el protozoo Pneumocystis carinii (PCP). Es una de las enfermedades oportunistas más comunes en VIH/sida. Sin tratamiento puede llegar a afectar al 85 por ciento de los seropostivos. Los pacientes con menos de 200 CD4 son los que presentan más riesgo de desarrollar esta neumonía. Los primeros síntomas suelen incluir dificultad para respirar, fiebre, tos seca, pérdida de peso y sudoraciones nocturnas. A pesar de que la PCP se encuentre entre las primeras causas de muerte en los pacientes con sida, es una enfermedad que puede tratarse y resulta prevenible, manteniendo las cantidades de linfocitos CD4 por encima de 20



· Tuberculosis: (TB) enfermedad causada por la bacteria Mycobacterium tuberculosis. Se transmite a través del aire y ataca a los pulmones, pero también puede causar meningitis; a menudo se manifiesta con toses secas, pérdida de peso y fatiga. A diferencia de la PCP, la TB puede aparecer en pacientes VIH+ con linfocitos T CD4 en cantidad superior a 200. Ya que las posibilidades de que un seropositivo presente TB pueden ser hasta 40 veces más que las de una persona no infectada por el virus, todos los VIH+ se someten a una prueba de detección de la tuberculosis, en cuanto se diagnostica la presencia del virus del sida. El tratamiento de la tuberculosis se basa en antibióticos; puede ser un proceso algo complejo y largo en los pacientes con VIH, pero se cura.

· Candidiasis: infección causada por un microorganismo, el hongo Candida albicans que puede encontrarse en la mayoría de las personas, si el sistema inmunológico es sano el organismo no desarrolla la enfermedad. En los seropositivos, la infección puede producir pérdida de apetito, enrojecimiento o manchas en la boca, lengua, o en la vagina. El tratamiento de la antifúngicos) cuando la infección persista o afecta de forma grave a ciertas partes del organismo (por ejemplo, el esófago). Los elevados niveles de azúcar pueden favorecer la infección, al revés que el ajo, que parece presentar ciertas propiedades antifúngicas.

· Citomegalovirus: (CMV) infección viral que podría afectar a todo el organismo. La enfermedad puede originar diarrea, meningitis y, con más frecuencia, retinitis (inflamación de la retina) que si no recibe tratamiento puede derivar en ceguera. Aproximadamente, el 90 por ciento de los pacietnes con sida sufren la infección por CMV. El riesgo de sufrir la enfermedad por CMV aumenta cuando los linfocitos CD4 se sitúan por debajo de 100. Los tratamientos del CMV han mejorado considerablemente durante los últimos 5 años, aunque no erradican la infección, sólo controlan al virus. La mayoría de los pacientes VIH+ pueden abandonar el tratamiento específico del CMV cuando alcanzan un nivel de linfocitos superior a los 200 y siguen una terapia antirretroviral.

· Herpes: el virus del herpes simple puede provocar herpes orales o genitales con cierta frecuencia entre los pacientes inmunodeprimidos, como los VIH positivos. Se trata de infecciones bastante comunes, pero la gravedad aumenta cuando van asociadas con el VIH/sida, pese a que puede producirse con cualquier cantidad delinfocitos T.

· Infecciones por MAC: las siglas MAC corresponden a Mycobacterium complejo avium-intracellulare, una bacteria que puede provocar fiebres recurrentes, malestar general, fatiga, anemia, problemas de digestión y hasta graves pérdidas de peso. La infección por MAC puede mostrarse con cierta probabilidad entre los seropositivos con cantidades de linfocitos CD4 por debajo de 50; es bastante raro que se produzca cuando los CD4 superan los 100. El tratamiento de esta infección se basa en la administración de antibióticos, que pueden estar contraindicados con los fármacos usados en VIH/sida, por lo que es importante que el médico sepa con exactitud el tipo de terapia antirretroviral que está siguiendo.

· Toxoplasmosis: enfermedad originada por un parásito que infecta al cerebro provocando conductas alucinatorias, cefaleas (dolor de cabeza), fiebre, desorientación, cambios de personalidad y mareos. Tiene más riesgo de sufrirlo el paciente con linfocitos por debajo de 100. La terapia suele ser muy eficaz, aunque la toxoplasmosis puede reaparecer.

· Sarcoma de Kaposi: enfermedad que afecta a un 20 por ciento de los individuos con sida. No se ha determinado completamente su origen; en un principio se clasificaba como un cáncer, pero recientemente, se ha vinculado con un tipo de herpesvirus. Si el sarcoma aparece en la piel no reviste un problema de gravedad, pero la situación es más grave cuando afecta a zonas internas del organismo, puesto que requerirá un tratamiento con fármacos quimioterápicos (empleados en otros tipos de cáncer).

Hepatitis C

La hepatitis C no se considera una enfermedad oportunista en sida, pero su incidencia entre las personas VIH positivas es muy elevada, porque la infección por el virus de la hepatitis C (VHC) se transmite al igual que el VIH por vía parenteral (pinchazos).

Se calcula que un tercio de los VIH positivos también están infectados por el VHC. De hecho la hepatitis C se ha convertido en la primera causa de hospitalización y una de las primeras de muerte en los enfermos con sida (en un 30 por ciento de los casos).



Al aparecer los nuevos tratamientos contra el sida (la terapia antirretroviral) se ha alargado la esperanza de vida de estos enfermos y por eso ahora están apareciendo muchos casos de hepatitis C. Antes se desconocía este dato porque los enfermos de sida no vivían muchos años y los síntomas de la hepatitis aparecen varias décadas después de que se haya producido la infección por el VHC.

Ahora, sin embargo, la hepatitis C se ha convertido en el principal problema médico al que se enfrentan los clínicos que tratan a los pacientes con sida. Según los últimos estudios, la evolución es peor entre los pacientes con las dos infecciones, que los de una sola.

Así, la cirrosis (una de las consecuencias más frecuentes de la hepatitis C) aparece a los 6,9 años en las personas infectadas por VHC y VIH, frente a los 23,2 años en los infectados solo por el virus de la hepatitis C.

A pesar de ello, los expertos confían en que la esperanza de vida de los pacientes coinfectados aumente y disminuyan las principales complicaciones de la hepatitis C gracias a los nuevos tratamientos.

Ondasalud.com

El cannabis provoca enfermedades mentales irreversibles

El consumo de cannabis aumenta aproximadamente un 6% la posibilidad de sufrir síntomas psicóticos como esquizofrenia o paranoia, en comparación con los jóvenes que no consumen esa droga. Ésta es la conclusión a la que ha llegado el doctor Jim Van Os, de la Universidad de Maastricht, y que ha publicado Nature.

Psicosis
El cannabis ya se había relacionado con la psicosis, pero los expertos no tenían claro si la droga podía causar por sí sola estos problemas o si, por el contrario, los psicóticos tenían tendencia a consumirla. Uno de los últimos estudios, publicado en el British Medical Journal, ha sido el primero que ha investigado los efectos del uso del cannabis, más que examinar los comportamientos pasados de los pacientes psiquiátricos. Los neurocientíficos sospechan que los efectos son debidos a un ingrediente psicoactivo del cannabis, llamado delta-9-tetrahidrocannabinol (THC). Este compuesto estimula a las células del cerebro para que liberen mayor cantidad de un neurotransmisor denominado dopamina, en un proceso que inicialmente estimula el placer, pero que, más adelante, puede conllevar paranoias y alucinaciones.

En enero de 2003, Ed Rosenthal, que promovía el uso del cannabis, fue procesado por un tribunal federal en San Francisco, según informaba el New York Times ese año. Rosenthal fue enjuiciado por manufacturar dicha sustancia para uso médico. El cirujano general de Estados Unidos, Richard Carmona, concluyó que esta sustancia, fumada, contiene de tres a cinco veces más alquitrán y monóxido de carbono que el tabaco. Y afecta al cerebro de forma similar a la cocaína y a la heroína asimilada por el cuerpo en cualquier formato.

El Consejo Pontificio para la Pastoral de la Salud, en su manual pastoral sobre drogas publicado en el año 2001, observaba los problemas de salud debidos a la marihuana y afirmaba que ponderando todos los hechos, es irresponsable considerar el cannabis de una manera trivial y pensar que pueda ser una droga blanda.

Últimos estudios
El último estudio que ha llegado a la redacción de ALBA, publicado en la revista Addiction después de estudiar el comportamiento de 1.000 pacientes, reafirma las investigaciones anteriormente citadas. Científicos de la Universidad de Otago, Nueva Zelanda, han demostrado que la ingestión de cannabis aumenta el riesgo de provocar y desarrollar enfermedades mentales como la esquizofrenia. Una de las secuelas más importantes que sufrían las personas que habían sido testadas, de entre 18 y 24 años, en esta investigación era el aumento de efectos psicopáticos en la mente del paciente según ha señalado el director del equipo de investigación, David Ferguson: El cannabis aumenta las posibilidades de sufrir crisis psicóticas