lunes, 19 de mayo de 2014

Tratar al paciente con VIH, beneficio para todos

Las nuevas guías clínicas recomiendan la TAR también por su efecto en las comorbilidades y en la transmisión.

Por Sonia Moreno Diario Médico 

Las últimas guías clínicas sobre el tratamiento antirretroviral en adultos infectados por el VIH -revisadas cada año por un panel de expertos de Gesida (grupo de estudio sobre VIH/Sida de la Sociedad Española de Microbiología Clínica) y el Plan Nacional del Sida- recomiendan instaurar la terapia en todos los pacientes con la infección.

Juan Berenguer, presidente de Gesida y uno de los artífices de las guías desde sus inicios, en 1996, indica a DM las razones por las que en las actuales se recoge esta recomendación, cuyo resumen telegráfico podría ser: por la recuperación inmunológica, las comorbilidades y el riesgo de transmisión.

"Las últimas guías americanas recogen la filosofía que siempre ha movido a nuestras guías de incluir cierta variedad de pautas para adaptarse a todo tipo de pacientes"
"Tratar la infección por VIH evita el deterioro inmunológico, como sabemos. A largo plazo, la recuperación inmunológica va a depender del momento en que se ha iniciado el tratamiento, y es una razón muy importante, pero no la única: alcanzar la carga viral indetectable beneficia a un grupo amplio de pacientes, como aquellos que tienen edad avanzada o los que sufren patología cardiovascular, hepática, renal, neurocognitiva o tumores".

Y además, en la recomendación de generalizar el tratamiento "también pesa el hecho de que se reduce el riesgo de transmisión. Diversos estudios nos indican que cuando una persona con la infección presenta carga viral indetectable se reducen las probabilidades de transmitir el virus prácticamente a cero, dicho con las reservas propias del ámbito médico. Pero así se ha visto en mujeres con la infección gestantes, así como en parejas heterosexuales y homosexuales".

"Otra razón que sostiene el inicio de un tratamiento precoz en el paciente con VIH es que las actuales terapias son mucho más eficaces, más fáciles de tomar y menos tóxicas"
La recomendación de iniciar la terapia antirretroviral (TAR), independientemente del momento del diagnóstico, coincide con las guías clínicas de las sociedades científicas estadounidenses, que se acaban se publicar hace unas semanas, y que llevan defendiendo esa idea desde hace tiempo.

Sin embargo, las guías americanas hacen suya ahora una filosofía que siempre ha movido las recomendaciones clínicas propuestas por Gesida, según destaca Berenguer. "Las guías americanas han sido tradicionalmente más reduccionistas que las españolas, en el sentido de que se ceñían a las pautas que obtenían mejores resultados en los ensayos clínicos. Nosotros, en cambio, recomendamos una serie de terapias preferentes, pero incluimos otras alternativas. Pensamos que la variedad es útil para el clínico, que así dispone de más opciones terapéuticas: no es lo mismo tratar a una mujer embarazada, a una que quiere tener un niño, a un paciente mayor con problemas crónicos o a un joven. Es importante incluir cierta variedad de pautas para poder adaptarse a todos los pacientes".

Las guías españolas son un compendio de recomendaciones en diferentes circunstancias clínicas. Incluyen cambios de tratamiento motivados por fracaso terapéutico o bien para aumentar la simplificación y comodidad del régimen. También se hace énfasis en los factores que condicionan que el TAR resulte eficaz, como la adherencia, los efectos adversos y las interacciones farmacológicas. Por supuesto, contempla situaciones especiales -infección aguda, por el VIH-2, embarazo- así como el manejo en la comorbilidad.

"Desde hace años, editamos, en paralelo a las guías, un documento de estudio de coste-eficacia de la TAR, realizado por expertos en farmacoeconomía ajenos a Gesida". El objetivo es asegurar que la inversión terapéutica sea la adecuada, en un momento de grandes ajustes. Igualmente, urge alcanzar ese objetivo en la introducción de los nuevos fármacos para el virus de la hepatitis C -la coinfección más común del VIH en España-, que son esenciales en cierto grupo de pacientes.

Comité Independiente AntiSida

Diagnóstico precoz del VIH, meta posible en las clínicas de ITS


Los centros monográficos tienen las tasas de detección tardía más bajas. El diagnóstico temprano beneficia al paciente y a la comunidad.

 Madrid.

El diagnóstico precoz de la infección por el virus del sida -cuantificado en al menos 500 linfocitos T CD4 por milímetro cúbico de sangre- se consigue con más probabilidad en dispositivos asistenciales monográficos que en centros de salud y hospitales convencionales.
Así, en Madrid, el Centro Sanitario Sandoval, clínica monográfica, ambulatoria, sobre infecciones de transmisión sexual (ITS), presenta una tasa del 6 por ciento de diagnósticos del VIH en la enfermedad avanzada (por debajo de los 200 CD4/mm3); algo más alta, el 9,8 por ciento, es la que se registra en el grupo Epi-VIH, que aglutina a una veintena de centros de ITS y diagnóstico de VIH de toda España, pero ambas son claramente inferiores al 28 por ciento que arroja el Sistema de información sobre nuevos diagnósticos de VIH (Sinivih), donde se encuentran los centros sanitarios normalizados. Se refrenda así que los centros no convencionales, donde el acceso es libre y gratuito, tienen más éxito en la detección precoz del VIH, al que aún persigue cierto estigma.

Jorge del Romero, coordinador del Centro Sandoval y fundador de la Plataforma de VIH en España, ha recordado que potenciar el diagnóstico precoz no sólo implica beneficios directos para el paciente -su sistema inmunológico se halla en mejores condiciones para recibir la terapia antirretroviral (TAR)-, sino que también redunda en la salud pública, pues está demostrado que se reduce la transmisión del virus.

De hecho, el Centro Sandoval, que cuenta con la única cohorte europea de parejas heterosexuales serodiscordantes al VIH, fue uno de los primeros en probar que la TAR es eficaz en la prevención de la transmisión sexual entre estos individuos.

El grupo que dirige Del Romero también colabora con el estudio europeo Partner, cuyos datos preliminares se han presentado en el último CROI, donde se observa esta vez en parejas homosexuales serodiscordantes ese efecto preventivo. Además, en el próximo congreso europeo de enfermedades infecciosas, en Barcelona, estos investigadores plantearán que el objetivo del diagnóstico precoz en VIH es alcanzable. Para ello, hay que informar a la población general y a la comunidad médica para que no bajen la guardia.
Leído en Diario Médico

Comite Independiente AntiSida