miércoles, 9 de marzo de 2005

El 72% de los menores que reciben información sobre el alcohol reconocen que son más prudentes a la hora de beber

El 72 por ciento de los jóvenes con edades comprendidas entre los 12 y los 18 años que han recibido información acerca de los efectos del alcohol reconocen que a partir de ese momento son más prudentes a la hora de consumir. Asimismo, el 37 por ciento de este colectivo asegura que informa a sus amigos sobre las consecuencias de la ingesta de bebidas alcohólicas, mientras que el 19 por ciento declara haber dejado de beber.

Así lo manifestó hoy en rueda de prensa el presidente de la Fundación Alcohol y Sociedad (FAS), Jaime Gil Robles, quien explicó los puntos clave del 'Proyecto Alba', que tiene como objetivo luchar contra el consumo de alcohol en menores a través de retrasar la edad de inicio de esta práctica, reducir el número de adolescentes que consumen y eliminar la cantidad de alcohol de los que ya se han iniciado en la bebida de este tipo de productos.

Para ello, la Fundación puso en marcha en el año 2001 este programa para llevar la información a los centros educativos en los que estudian jóvenes de entre 12 y 18 años, ya que, junto con los conductores, son un colectivo de riesgo en lo que al consumo de alcohol se refiere.

De esta manera, el Proyecto Alba trata de destruir los "mitos" que surgen entre los jóvenes en relación con este tipo de bebidas facilitándoles información objetiva acerca de las consecuencias que pueden provocar en su organismo para que sean ellos mismos los que saquen sus propias conclusiones.

En cuatro años, FAS ha organizado un total de 2.799 conferencias para 47.111 alumnos de 200 centros educativos de la Comunidad de Madrid en los que se ofrece información tanto a los profesores y los estudiantes como a los padres de éstos, pues, según Gil Robles, actualmente "la familia delega la asesoría en materia de drogas, sexo o civismo a los colegios".

Madrid, Cataluña y Andalucía

La Fundación ha llevado a cabo esta iniciativa en centros de Madrid, Cataluña y Andalucía debido a que son comunidades que resultan representativas a la hora de sacar conclusiones a nivel nacional. Además, la región andaluza ofrecía más posibilidades acerca del consumo de alcohol en ámbitos rurales. En total, FAS ha impartido conferencias en 1.000 centros para un total de 12.617 alumnos.

Según Gil Robles, los resultados derivados del 'Proyecto Alba' "demuestran que la educación en este campo es la mejor herramienta para prevenir que los jóvenes beban alcohol". De hecho, el 59 por ciento de los adolescentes entrevistados en 2004 se declaran consumidores de bebidas alcohólicas frente al 65 por ciento registrado en 2001.

El presidente de FAS aclaró que sólo un 10 por ciento de los menores se drogan o beben de una manera "preocupante", mientras que el resto "lleva una vida sana en sus comportamientos de consumo".

Además, este colectivo es el que está más interesado en recibir información acerca de los efectos y la peligrosidad de este tipo de sustancias.

Por último, Gil Robles indicó que ya se han puesto en contacto con los consejeros de Educación y Sanidad de la Comunidad de Madrid, Luis Peral y Manuel Lamela, respectivamente, con el objetivo de que la Administración regional delegue a la Fundación Alcohol y Sociedad las funciones de informar a los adolescentes y luchar contra el consumo de alcohol entre los menores.