lunes, 17 de mayo de 2021

ONU y los Donantes Occidentales revelan su agenda sexual sobre VIH SIDA


NUEVA YORK, 30 de abril (C-Fam). Con el pretexto de abordar el problema del VIH/SIDA, las agencias de la ONU y los grupos no gubernamentales respaldados por Occidente han pedido a los gobiernos que legalicen el consumo de drogas y la prostitución. Esto ha ocurrido la semana pasada, durante una consulta celebrada por la Asamblea General. En esta también se ha pedido la autonomía sexual de los niños.

A pesar de que las infecciones por VIH/SIDA han disminuido en todo el mundo desde 2005, la pandemia del VIH/SIDA sigue haciendo estragos en las “poblaciones clave”, que incluyen a los hombres que mantienen relaciones sexuales con otros hombres, a las personas que se identifican como transexuales y a los consumidores de drogas. Según las estimaciones de la ONU, el 54% de los 1,7 millones de las nuevas infecciones que se producen cada año en el mundo tienen lugar en las poblaciones clave.

“La lucha para acabar con el SIDA está vinculada a la lucha para acabar con las violaciones de los derechos humanos, incluidas la discriminación y la violencia contra las mujeres y las niñas, así como la marginación y la criminalización de las personas que viven con el VIH en las poblaciones clave”, afirmó Winifred Karagwa Byanyim, Directora Ejecutiva del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (ONUSIDA).

“Son los trabajadores del sexo, las personas que consumen drogas, los homosexuales, los bisexuales y otros hombres que mantienen relaciones sexuales con hombres, son los transexuales y otros grupos como los presidiarios”, subrayó.

El programa de ONUSIDA tiene una gran influencia en la forma en que se gasta la ayuda internacional para hacer frente al VIH/SIDA, incluidos los casi 7.000 millones de dólares que los contribuyentes estadounidenses aportan cada año.

Entre los oradores del evento de la Asamblea General se encontraban líderes cuidadosamente seleccionados ONGs respaldadas por Occidente, como la Federación Internacional de Planificación Familiar (IPPF).

“Me siento parte de un fracaso colectivo, un fracaso colectivo para garantizar que las adolescentes y las mujeres jóvenes en toda su diversidad, el colectivo LGBTQI y otras poblaciones clave puedan acceder a servicios integrados de calidad, que respondan a sus derechos y a sus necesidades de salud”, dijo Álvaro Bermejo, Director General de la Federación Internacional de Planificación de la Familia.

Bermejo fue transparente en cuanto a los retos de su propia organización, que afirma prestar más de 40 millones de servicios de VIH/SIDA al año en los países en desarrollo.

“Vemos cómo, en muchos países, las adolescentes y las mujeres jóvenes acuden a recibir sus anticonceptivos y un año después regresan con una infección de VIH”, dijo Bermejo, y achacó este fracaso a la oposición a la educación sexual integral, de la que la IPPF es el mayor proveedor internacional.

“Tenemos que ser conscientes de que nos enfrentamos a una oposición, una oposición conservadora, una oposición populista, que se opone a la educación sexual integral y que está mejor organizada, mejor financiada y es más agresiva que nunca”.

Otros oradores también ampliaron el enfoque del tratamiento del VIH/SIDA a otras políticas sociales.

Julian Boghos Kerboghossian, de la organización LGBT MPact Global, hizo un llamamiento a los países para que “deroguen las leyes que penalizan la no revelación del VIH, la exposición, la transmisión, el comportamiento consentido entre personas del mismo sexo, la expresión, el consumo de drogas y el trabajo sexual”.


Comité Independiente AntiSida