lunes, 5 de junio de 2006

El alcohol y las drogas ilegales provocan un creciente número de trastornos mentales


Prevenir contra la heroína resulta relativamente sencillo cuando los jóvenes han podido ver en las calles sus efectos. El problema es cuando la población no percibe el peligro de una droga. Es el caso del cannabis. Según un reciente informe de la Comisión Clínica del Plan Nacional sobre Drogas, su consumo triplica el riesgo de sufrir algún tipo de psicosis, aunque ésta puede aparecer muchos años más tarde. Hay información de sobra, pero no es este mensaje el que prefieren los jóvenes: la mayoría de las páginas web que visitan sobre este tema hacen apología del porro.
También preocupa en el Ministerio de Sanidad la tolerancia social hacia la cocaína. Un estudio del Plan Nacional sobre Drogas habla de un crecimiento espectacular en los ingresos hospitalarios generados por esta sustancia: de 932 en 1992, a 7.125 diez años más tarde. Se advierte, además, de que la cocaína multiplica por 24 los riesgos de sufrir un infarto. Y de los efectos para la salud mental: entre un 65 y un 70% de los consumidores crónicos sufren paranoias.

Los dos informes, publicados en mayo, tienen un denominador común: los efectos no se ven de inmediato. Ocurre otro tanto con las llamadas "drogas de diseño", herederas del LSD y las anfetaminas. Los expertos advierten de que, tarde o temprano, los hospitales psiquiátricos se llenarán de pacientes que, quizá en su lejana juventud, las consumieron.

Mientras tanto tenemos sólo un lento goteo de datos. La última encuesta de morbilidad hospitalaria (2004) del Instituto Nacional de Estadística recoge 9.525 altas hospitalarias por trastornos mentales debido al consumo de drogas ilegales, resultados casi idénticos a los de 2003. Sumada la cifra a los efectos psiquiátricos del alcohol, arroja un resultado de 20.029, casi 300 más que el año anterior. El diario El País compara los resultados combinados de alcohol y otras drogas con los de 2000, advirtiendo de que los métodos de medición eran distintos entonces. La comparativa arroja un aumento del 56%, "muy superior al 6,6% en que se incrementó la población", según añade la información.

Fuentes: INE. Estudios de morbilidad hospitalaria 2003 y 2004, Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas y El País (suscriptores)


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